Antología de Textos de Luis Sandoval Godoy.- Edición conmemorativa en el aniversario XXV de la Congregación episcopal del Arzobispo de Guadalajara Cardenal José Francisco Robles Ortega. Año Jubilar de la Misericordia.
Por Alvaro López.- Publisher Editor EDICIONES ICONO.- Doscientas diez páginas de una preciosa edición.- Con una presentación del Comité Diocesano para el año de la Misericordia, quince capítulos conforman este compendio que llega a nuestras manos .Engastadas en el marco del Jubileo Extraordinario de la Misericordia convocado por el Papa Francisco entre los años 2015 y el 2016, la Arquidiócesis de Guadalajara festeja las Bodas de Plata episcopales de su arzobispo, el Cardenal José Francisco Robles Ortega, resaltando tres aspectos derivados del nexo que los sacramentos producen en quien los recibe: el sacerdocio real de los bautizados, el ministerio ordenado y la sucesión apostólica, que nacen de la misma fuente, el costado abierto del Señor y continúan en el mandato que Él dio a los apóstoles antes de ascender glorioso a los cielos: ir por todo el mundo predicando el Evangelio y bautizando a toda creatura en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo, cuya efusión, en la fiesta judía de Pentecostés, recibirán ellos contando con la presencia de María, la madre de Jesús.
Don José Francisco Robles Ortega nació en Mascota, Jalisco, el 2 marzo de 1949 y allí mismo fue bautizado. Ese sacramento hizo posible todo lo demás: su ordenación presbiteral para el clero de Autlán, de manos de su obispo don José Maclovio Vázquez Silos, el 20 de julio de 1976. Su elección como obispo titular de Bossa y auxiliar de Toluca, decretada por san Juan Pablo II el 30 de abril de 1991.
Cardenal José Francisco Robles Ortega. Año Jubilar de la Misericordia.
Su consagración, el 5 de junio de 1991, por ministerio del obispo residencial de esta sede, don Alfredo Torres Romero. Cinco años después, el 15 de junio de 1996, la Santa Sede le confió esa Iglesia particular de forma plena y la atendió hasta el 25 de enero del 2003, cuando pasó como titular de la arquidiócesis de Monterrey, de la que tomó posesión el 28 de abril siguiente. El Papa Benedicto XVI lo creó Cardenal presbítero el 24 de noviembre del 2007, dándole el título de Santa Maria del la Presentazione, moderna parroquia romana al noroeste de la Urbe.Electo arzobispo de Guadalajara el 7 de diciembre del 2011, ocupa esta cátedra desde el 7 de febrero del 2012. Entre muchas encomiendas, este año 2016 acaba de ser reelecto Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano.Coherente con la línea pastoral del pontificado del Papa Francisco, su homónimo Arzobispo guadalajarense dispuso que la acción de gracias por sus bodas de plata episcopales se centrara en la fuente y cumbre de la vida cristiana: la Eucaristía, que él presidió en su catedral el domingo 5 de junio del año en curso 2016, a las 12 horas.
Para secundar ese deseo, que excluye todo gesto de boato y triunfalismo, la Comisión organizadora del Año de la Misericordia ha querido ofrecer al clero de Guadalajara y a todos los que lean Glorificados en Cristo, una antología de textos del fecundo escritor don Luis Sandoval Godoy (El Teúl, Zacatecas, 1927), dedicados a los mártires mexicanos. Diligente y generoso, el primero y casi el único escritor en acometer una tarea que debió haber sido la base de la veneración de nuestros santos mexicanos dándolos a conocer a través de fuentes primarias documentales y testimoniales, recuperó estos testimonios de libros o impresos suyos, privilegiando la palabra de quienes vieron y oyeron lo que afirman.Como ahora se repite mucho, haciéndole eco al actual Obispo de Roma, los mártires mexicanos fueron pastores con olor de oveja, y la fidelidad a su ministerio, el de Cristo, buen Pastor, los llevó a mantenerse en sus destinos atendiendo la encomienda de su prelado, cuando la sensatez y la cordura aconsejaban lo contrario.
Al tiempo de su captura, prefirieron arrostrar la muerte, conscientes de que la palma del martirio es un don inmerecido, y sin oponer resistencia a sus verdugos, que los mataron por odio a su fe, los perdonaron de todo corazón.Este elenco no pretende ser exhaustivo y se refiere no a todos los mártires sino sólo a aquellos que han sido objeto de la especial atención de un escritor que es también hijo del Seminario de Guadalajara, especialmente del de Nuestra Señora de Guadalupe, en Totatiche, que festeja el primer siglo de su fundación este año 2016, a lo cual obedece que la mitad de estos textos evoquen a los fundadores del Silvestre, como san Cristóbal Magallanes apodaba a ese plantel, Casa benemérita por muchos motivos.
Señalemos, finalmente, que hace 90 años, e121 de junio de 1926, el Presidente de México Plutarco Elías Calles tomó la decisión de descatolizar al pueblo de México utilizando para ello todos los recursos del Estado: jurídicos, ideológicos y económicos. Comprometiendo el honor del Ejército Nacional lo involucró en un capítulo que nunca podrá ser explicado de modo satisfactorio. Aunque no todos estuvieron de acuerdo, los treinta obispos residenciales que entonces había en México, en protesta por la entrada en vigor de la llamada Ley Calles, tomaron de forma colegiada y con el visto bueno de la Santa Sede, la determinación de suspender el culto público en los templos, dejando a su clero en la espantosa encrucijada de desafiar al supremo gobierno; colocando a los jefes milicianos en el más triste de los cometidos, y dando al pueblo enardecido el argumento para creer que el gobierno callista había dispuesto la clausura y confiscación de los templos; de ello derivó, en 1927, la resistencia activa en contra de las tiránicas leyes que adicionaron al Código Penal Federal
“en materia de culto religioso y disciplina externa”
En esos renglones torcidos escribió Dios las páginas que siguen, divulgados ahora tanto para la edificación de propios y extraños como para que sirvan de ejemplo de lo que nunca más debe volver a pasar: que un gobernante se arrogue la pretensión de mutilar la libertad religiosa de sus súbditos.
Guadalajara, Jalisco; domingo 5 de junio del año 2016.- Aniversario XXV de la Consagración Episcopal de S.E.R. José Francisco Robles Ortega
Décimo Arzobispo de Guadalajara
El Comité Diocesano para el Año de la Misericordia
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